Por: RUBÉN MORETA
El gobierno se ha esmerado en la construcción de un amplio circuito vial en la Región Este del país, para facilitar el desarrollo turístico de esa icónica zona. Pero en las provincias de San Juan y Santiago hay frustración y desánimo, ante la negativa gubernamental en construir una carretera que una estas dos demarcaciones limítrofes.
El pedido de construcción de la carretera San Juan-Santiago data desde principios del siglo pasado, estando en el gobierno el Presidente Horacio Vásquez, pero ninguna administración -irresponsablemente- ha decidido a acometerla.
Se esperaba la ejecución de esta obra vial en la gestión de Danilo Medina, por ser el mandatario nativo de San Juan de la Maguana y conocer los esfuerzos desplegados por el liderazgo local durante más de un siglo, para que la construcción de esta carretera se haga realidad.
Los anhelos de los habitantes de las provincias de San Juan y Santiago han sido magullados con la negativa del presidente Danilo Medina de cristalizar la construcción de la verdadera carretera cibao-sur, esfumándose los sueños y expectativas de dos provincias cuasi siamesas, pero que han estado distanciadas por falta de una vía de comunicación que las enlace de forma expedita.
La vía San Juan-Santiago crearía un flujo importante de intercambio comercial, de turismo transprovincial y de relación cultural. Sería una obra de gran calado e impacto social y económico para el sur y el norte.
Esta administración dio un duro golpe a los sanjuaneros al no construir la carretera San Juan-Santiago en este cuatrienio que se agota, después de tantas promesas de que ejecutarían la vía.
Ojalá en el próximo ejercicio de gobierno, Medina se anime a construir la vía, que la respaldan la UASD, la PUCAMAIMA, UTESA, todos los grupos económicos de Santiago y San Juan, y los sectores sensatos de la República Dominicana.
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