Mal contadas, entre las provincias de San Cristóbal y Peravia operan alrededor de 40 empresas dedicadas a la extracción de arena y agregados.La mayoría no observan respeto al medio ambiente ni a los núcleos humanos que las circundan, y más de la mitad se encuentran instaladas en San Cristóbal, y por años habían desarrollado la actividad bajo la lógica de la depredación de ríos y suelos, sin tomar en cuenta el daño ecológico que ocasionan.
La situación, denunciada hasta la saciedad por grupos ambientalistas y las comunidades mismas, continúa desarrollándose, en gran medida con el permiso del Ministerio de Medio Ambiente, otras formas furtivas e irregulares.
Desde la gestión del ex ministro de Medio Ambiente Max Puig, fueron prohibidas las extracciones de materiales y agregados para la construcción de los ríos y sus inmediaciones, por lo que la actividad migró hacia otros terrenos, incluso aptos para el cultivo.
Al borde de la carretera
Otras empresas continúan extrayendo materiales en violación a la Ley 123 sobre la extracción de materiales, que manda que la actividad se haga a no menos de 60 metros de las carreteras.
Es el caso de varias empresas areneras instaladas entre la ciudad de Baní y el Cruce de Ocoa, específicamente en el kilómetro 7 en la comunidad de Galión, cuyos materiales están colocados en la misma cerca y amenazan con deslizarse hacia la autopista.
Ninguna de las empresas están identificadas con nombres visibles, y al preguntar por los responsables, empleados de dos de ellas afirmaron papeles en manos que sus propietarios, a quienes identificaron como Emilio Cury y Chiqui Marcano, cuentan con los permisos de Medio Ambiente para operar.
Otras mantienen sus entradas cerradas y personal de seguridad impide el paso de personas que entiendan son extrañas, como es el caso de la prensa.
Agresión al ambiente
La mayoría de esas empresas, al igual que otras ubicadas en Hatillo y Nigua, desarrollan sus actividades sin tomar en cuenta el cuidado del medio ambiente y solo se preocupan por extraer materiales.
Es común ver camiones siendo cargados de agregados extraídos de los cauces de los ríos, muchos de ellos operados por empresas que cuentan con los respectivos permisos de Medio Ambiente, como explicó el viceministro de Suelos y Agua, José Alarcón Mella.
Alarcón Mella explicó a este diario que Medio Ambiente otorga permisos para algunos ríos que el Ministerio trabaja en su saneamiento y encauce, por lo que la extracción de agregados y otros sedimentos son supervisados y se hacen de manera regulada.
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